jueves, 20 de agosto de 2009

El lugar sin límites

Apagá la luz, vendate los ojos y escribí tratando de no pisar un renglón con otro. Podés decir lo que quieras, hacer lo que quieras, podés girar la hoja y que ahora ella también sea parte de tu texto. No hay un mínimo de caracteres, tampoco importa que sea del todo legible. Es un ejercicio, date cuenta, y cuanto menos pienses mejor.

Hay cosas que no me ven pero están.

No hay comentarios: