martes, 1 de septiembre de 2009

Rompiendo el hielo

Me pide el bolso, sé que eso es lo que quiere aunque apenas lo escucho. Lo escucho pero no podría reconocer su voz. Es terrible.
Hay un tren que llega. Pasarán treinta segundos hasta que la gente suba y, despacio, se empiece a ir. Treinta segundos, nada más que él y yo, para explicarle que no puedo hacer lo que me pide, para que entienda.

Te estarás preguntando qué clase de persona soy, que te doy 232 pesos como si nada pero me rehúso a entregar el cuadernito. Bueno, sabélo, el cuadernito no te lo doy. Es mío, tiene cosas mías, no te lo puedo dar. Gasté demasiada tinta y demasiadas hojas, tomé mucho café en muchos bares con chicas lindas que venían y me decían, azúcar o sacarina. No te voy a dar así porque sí lo que escribí, olvidate, en este cuadernito está la historia que nació en Nicaragua hace como trescientos años, y ya voy por el bisnieto, que va a ser asesinado a manos de un hermano que tuvo pero nunca conoció. Hace seis meses que estoy con lo de Nicaragua, Rubén Darío, León, Granada, William Walker, Sandino, y vos querés que te lo dé, mirá, acá encontré dos pesos más, 234 en total, me iba a comprar un celular, pero no importa, te los doy a vos, 234, en efectivo, andá y hacé lo que quieras, comprate algo, gastalo, conseguite un cuchillo más afilado, o algo que dispare, invertilos, pero el cuadernito me lo quedo, eh, seis meses, Sandino, William Walker, no, el cuadernito me lo voy a quedar, no te lo doy; apurate que viene alguien, apurate, dale, no digo nada, me hago el boludo, perdí la guita por ahí, la dejé en el pantalón y lo metí en el lavarropas, andate antes de que venga alguien y me delate con la mirada, antes de que te delate a vos quiero decir, este llavero me lo regaló mi ex, si no te lo daba, pero ya tenés 234 pesos, no te podés quejar, en una semana, cinco días hábiles, estás hecho, pero mi cuaderno, mi cuadernito, a vos no te sirve, mirá si ahora tuvieras el cuadernito en la mano en lugar de eso, sería más difícil para vos, mucho más difícil, yo no sé si entregaría 234 pesos sin oponer resistencia alguna, por eso te digo, dejame el cuadernito, no te lo lleves, dejamelo, es lo único que te pido, no me hagás esto, vos no sabés, no me podés hacer algo así, por favor te pido, por favor, te lo estoy pidiendo, no te lo lleves, es que no te das cuenta, no me podés hacer algo así